jueves, 26 de julio de 2012

Cesárea vs Parto Normal (Parte I)

Cuando se me ocurrió la idea de iniciar un blog, en realidad fue para contar mi experiencia dando a luz por parto normal en Venezuela. Algo que muchas mujeres de mi país no quieren vivir, por terror al "dolor y sufrimiento" y de una le dicen a sus obstetras que quieren cesárea. Y así mismo , muchos doctores programan cesáreas, para agilizar sus citas y sus "ganancias".

Cuando salí embarazada, mi mayor ilusión era parir a mi bebé, sentir la misma experiencia que tuvo mi madre al tenerme, nunca ví ese momento como algo de sufrimiento, sabía que podía doler, pero mi mamá siempre me decia es un dolor que pasa en lo que ves nacer a tu hijo. Así que día día de mi barriguita, fue recreando ese momento en mi mente. Me visualizaba tranquila, con mi esposo nervioso tomando mi mano, diciéndome que todo iba a pasar :) y luego mi bebé en mis brazos... Muy lindo verdad...

Inicié mi curso prenatal, con una psicóloga maravillosa, que me hizo visualizar con más amor el momento de tener a mi bebito, me llené de más energías y cuando en el trabajo me decian que estaba loca por tener a mi bebe de manera natural, que para qué queria sufrir, simplemente reía, ya no quería seguir discutiendo, hasta hubo comentarios de que si paría iba a quedar muy ancha "ahí" y que luego mi esposo ya no iba a querer estar conmigo jajajaja. Comentarios de gente que ha estudiado toooda su vida y son profesionales jejejejejeje. Todavía me sigo riendo.

Mi obstetra siempre me dijo que es partidiario de los partos normales, pero que el eválua la condición y si no podía parir, no me iba a someter a horas de dolor para mi y al bebé, yo simplemente pensaba si mi mamá parió dos veces, yo también puedo. Llegaron las 37 semanas y llegó el momento de la evaluación, el esperando tacto, y auchh que dólor con esa exploración, yo simplemente pensé en ese momento, que era por incomodidad y por la presión de mi barrigota, pero llegarón las temidas palabras de mi doctor: "Tienes la pelvis muy estrecha, vas a sufrir mucho pariendo y yo no te voy a someter a eso".... Un balde de agua fría cayó sobre mi, yo pelvis estrecha, cuando soy una mujer de caderas anchas y un poquito pasada de peso, como que no puedo parir... Mi doctor se dió cuenta y me dijo los pros y la seguridad de la cesárea y decía mil veces, no te voy a someter a un sufrimiento de horas cuando al final vamos a tener que recurrir a una cesárea. Mi esposo me apoyaba muchísimo en tener a nuestro hijo de manera natural y salimos tristes de esa consulta. El doctor quería programar la cesárea para el 17 de mayo, por lo menos logramos convencerlo que de mi bebé decidiera el día, yo quería por lo menos sentir mis contracciones y tratar de tener mi cesárea por lo menos lo más "natural" posible.
Saliendo de la clínica llamé a la instructora del curso, ella me inspiró a seguir, que pensara que si iba a poder parir y que caminara mucho, y así lo hice.

Lo que más recuerdo del curso, fue que nos dijeron que se aprobaba mucho una cesárea en casos de preclampsia y cuando el bebé se hace popó adentro. El universo conspiró para que yo aceptara mi cesárea, porque el 19 de mayo, mi bebé no se aguantó y se hizo "tinta" dentro de mi jejejeje. Ese día sentí un líquido, que en ningun momento fue transparente o amarilloso, era verde. Mi mamá me habia comentado del caso de una amiga, y de una supe que mi bebé se había hecho popó, un sábado a las 7 am, Dios me dió mucha serenidad, sentía como salía ese líquido, desperté a mi esposo y llamé a mi doctor, él en ningun momento me dijo que mi bebé corría peligro, seguramente para no asustarme, sólo me dijo que me fuera a la Clínica, pero que lamentablemente el no podía estar porque justamente ese día estaba fuera de Caracas con su familia... eso si me asustó, ahora me iba atender un doctor que no conocía... Así nos fuimos a la clínica que gracias a Dios, nos queda a 5 minutos de nuestra casa. Llegamos y yo me fui tranquila caminando a la unidad de maternidad, mientras mi esposo estacionaba el carro. En la entrada de la clínica me obligaron a sentarme en una silla de ruedas jejeje, las odio, pero bueno, protocolo que cumplir, y me llevaron a la unidad de maternidad, donde ya mi doctor había informado que yo iba de urgencias y me estaban esperando. Fue una muchacha joven la que me atendió, pero nunca voy a olvidar el tacto horrible que me hizo, no hubo nada de delicadeza, me ocasionó un dolor terrible, la enfermera sólo me tomaba mi mano y me miraba cuando yo gritaba del dolor, fueron 5 minutos terribles. De una me dice que tengo ya líquido meconial y que me tienen que hacer mi cesárea de urgencias, llaman a mi esposo le informan todo y que vaya a "admisión", mientras a mi me preparan para la operación. Yo sólo me encomendé a la Virgen y le pedía por mi bebé.
El anestesiólogo fue la persona más simpática en todo momento, me hacia sentir tranquila, me puso la anestesia sin que yo me diera cuenta y me hablaba de todo lo que iba  pasando, recuerdo que me decía que la cesárea era como ir al dentista, que no me iba a doler pero iba a sentir que me tocaban por dentro jejeje y la verdad así fue. Me sentia indefensa, con la cortina que tapaba lo que los doctores y lo que me hacían, antes de que me abrieran vi a mi esposito de lejos cambiandose la ropa y lanzandome besitos...
 

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